Escape al Paraíso
Es conocida como isla de las flores, del sol y las playas; pero más allá de esos 3 conceptos, existen un buen número de atractivos naturales y turísticos que usted puede disfrutar. A solo 25 minutos de la ciudad capital, en un recorrido que inicia en la salida de la vía interoceánica, con vista al Puente de las Américas, a bordo de las cómodas embarcaciones de la compañía Ferry Roka; llegas a una de las playas emblemáticas más visitadas de la provincia de Panamá, Taboga.
El imán que despierta esta isla no solo se deriva de lo visible; como su arena blanca, aguas cristalinas, el tejido humano con una permanente sonrisa de bienvenida; si no que además; se suman sus costumbres y una pletórica historia que resurge entre sus callejones, zaguanes y áreas naturales.
Taboga no solamente se ve, si no que también se siente; entre el aire fresco, el olor a flores y un sol cómplice de esa alegría. Cada rincón tiene su atractivo particular. Nada es más relajante que un chapuzón en las aguas de playas La Restinga, Honda, El Jobo o Aspinwall; para los amantes del senderismo y la naturaleza los lugareños recomiendan un recorrido por el Cerro El Vigía o Cerro La Cruz.
Otra opción más tranquila es una caminata que te llevará a diversas épocas históricas y es que el destino, fue refugio tanto del conquistador Francisco Pizarro en tiempos coloniales y más tarde de afamados piratas como Henry Morgan.
Este paraíso tropical inspiró a grandes artistas; entre ellos al escritor panameño Rogelio Sinán, cuya casa puedes visitar hoy día y hasta conocer un poco más del novelista, cuentista y ensayista tabogano al conversar con su bisnieto, quién hoy vive en la pintoresca casa, ubicada a la orilla del mar. También vivió allí el famoso pintor francés Paul Gauguin, considerado uno de los máximos exponentes del postimpresionismo.